viernes, 19 de septiembre de 2008

¡¡LA COSA MARCHA...!!

Hola a todos:

Muchos sabreis que tengo un 2011/50 desde hace ya más de 8 años, y que es además el primer camión que compré. Hasta hace algo más de un año no se empezó a restaurar y fue gracias al ofrecimiento de mi buen amigo Julio Martinez, que se ofreció a tener el camión en su casa, y ayudarme a restaurarlo. Tras comenzar a desmontarlo, la llegada del otoño en 2007 paralizó los trabajos, y eso unido además a mi reciente paternidad, hicieron que el trabajo se quedase parado.
Gracias a Julio, la cosa se ha puesto de nuevo en marcha y sacando horas y tiempo de donde no hay, la otra tarde me quiso dar una sorpresa, y me encontré el cabezón en el estado que a continuación os muestro:





Pues Julio se pegó la paliza de lavar y raspar el camión a fondo, que estaba penoso de óxido, y ya le ha pintado el chasis y la cabina, todavía es la primera mano, así que cuando se le tire la segunda mano estará de dulce. Se ha pintado el motor y el interior de la cabina, intentando respetar al máximo el estado original del vehículo, es decir queremos que quede tal y como salía de fábrica.

A partir de ahora queda cambiar filtros, aceites y líquidos, terminar de solucionar un problema de chapa que tiene la espalda de la cabina y ultimar los detalles, terminar de pintar los colectores de escape del motor, cambiar el volante, colocar la litera que la tengo de hace tiempo, los faros Rinder se han comprado, y queda pintar y colocar todos los elementos auxiliares del chasis, calderines, cajas de baterias, depósito, etc.

La parte importante del trabajo está hecha gracias a Julio, que le ha dado el empujón definitivo a este proyecto. De él solo puedo deciros cosas buenas, gran profesional de la carretera y mejor persona, lleva toda la vida en esto del transporte y es un enamorado de los viejos camiones. Tiene una buena colección que ha continuación os pongo:


Este Ebro fue su primera restauración, empleó en él más de 2000 horas de sus fines de semana, y lo restauró hace 18 años. El camión estaba de pena y tras la restauración, Julio lo utilizó para trabajar.



A este Pegaso le tiene un cariño especial, fue de su hermano y él también lo condujo. Tras unos años fuera de la familia lo pudo recuperar y restaurar. Ha quedado de cine, y el camión es uno más de la familia.




Este Ebro E 60, trabajó en una empresa de cubas y cuando Julio lo compró estaba destrazado. La restauración está casi terminada y seguramente este camión vuelva a trabajar con él.


Este D 350 ha caido en sus manos y está a la espera de pasar por sus manos. Ya os contaré.
Su última adquisición clásica fue este Europa. Siempre quiso tener uno y este que está en un estado impecable y siempre ha estado guardado en cochera se puso a tiro y no se escapó.
Bueno espero que os haya gustado el reportaje. Al cabezón le queda un mes o dos para estar rodando, así que ya pondré nuevas fotos de su estado final.

Quiero dar desde aquí las gracias a Julio Martínez por todo lo que hace por mi, y por la paciencia que tiene conmigo y mis Pegaso. Gracias Julio y no cambies nunca. También gracias a toda su familia por lo bien que nos tratan siempre.

Saludos

martes, 8 de julio de 2008

No es bueno caminar por los desguaces (Operación rescate Pegaso 2080/54)


Y ya lo creo que no es bueno, os lo digo por experiencia. Andaba hace un par de semanas buscando unas cosas para el Troner en un desguace al que suelo ir, y paseando tranquilamente a ver lo que había entrado, descubrí detrás de un Tecno, la parte alta de una cabina que me resultó familiar. Efectivamente era un cabina cuadrada, aunque me tuve que acercar para cerciorarme de que se tratabe de una cabina fija, y encima lo que estaba ante mi era una tractora, vamos, lo más dificil de encontrar de esta gama, ya que son los modelos que se retiran antes del servicio, al ser vehículos de ruta.






El camión a pesar de haber estado parado mucho tiempo, no presentaba mal aspecto, a pesar de que le faltaban algunas cosas, y la cabina tenía un golpe muy fuerte en el lado derecho, lo importante era ver si el motor arrancaba, lo demás tenía arreglo.



De vuelta a la salida del desguace la cabeza no paraba de darme vueltas, aunque en realidad, y sin querer reconocerlo, me había decidido a comprarlo. Hablé con uno de los dueños del desguace sobre su disposición a venderlo, y me dijo que lo tendría que consultar con sus socios, y que me pasase la semana próxima. Transcurrida una semana, allí estaba de nuevo a ver como se resolvía el tema, y afortunadamente me dieron la buena noticia, el camión me lo vendían a precio de chatarra, que no es precisamente barata en estas fechas, pero aún así merecía la pena.


La siguiente visita sirvió para pesar el camión, cerrar el precio, y para realizar el transporte. Como siempre del transporte se encargó Gruas y Talleres Saavedera, grandes profesionales y de un trato exquisito, desde aquí quiero dar las gracias a Ángeles (por su paciencia conmigo) y a Fernando , por su buen hacer a la hora de transportar a mis Pegaso.







Previamente el camión había sido arrancado por dos operarios del desaguace, que hicieron resucitar el motor de 260 cv, que no tardó en arrancar y en demostrarnos como sonaba, nada mal por cierto. El moverlo fue más complicado, ya que había un problema con las válvulas que accionan el cambio, y que hacían que las marchas no entrasen. Solucionado el problema el camión se puso a andar sin problema y pude conducirlo durante más de 5 kilómetros hasta la báscula donde había que pesarlo. Una experiencia inolvidable, os lo aseguro.


Pues como os iba diciendo, la operación de carga se realizó sin necesidad de arrancar el camión y una vez asegurado y bien amarrado, nos pusimos en marcha hacia su nuevo hogar.


El trayecto no presentó dificultades y por fin llegamos a destino. Teniamos la necesidad de que para la descarga la grúa entrase en la nave para no arrancar el Pegaso, y aquí es donde nos encontramos el problema de que el camión no entraba, ya que daba por arriba con la puerta basculante y no pasaba por apenas 5 ó 6 centímetros. Como la suspensión neumática del Atego estaba abajo del todo, no nos quedó otra solución que desinchar un poco las ruedas delanteras del Pegaso, y el problema quedó resuelto. Con la colaboración de mi hermano Guillermo, entre los tres pudimos por fin dejar el Pegaso descansando en la nave junto al 2089 y el Troner.


Bueno amigos, como véis nuevamente nos hemos metido en el lío de comprar otro Pegaso, y como siempre ha merecido la pena 100 %... hasta la próxima, que seguro habrá una nueva operación rescate.


Saludos

lunes, 17 de marzo de 2008

BONITA IMAGEN

Aprovechando que todavía están realizando obras en el polígono donde está la nave que guarda mis camiones, hay diversa maquinaria y material que quedan allí aparcados durante los fines de semana. Entre todo esto hay una góndola que lleva más de un mes sin moverse del mismo sitio.

Ya que aprovecho las tardes y la tranquilidad de las calles del polígono para dar vueltas con el 2089 y practicar con el cambio Fuller, el otro día se me encendió la bombilla y viendo la góndola, pensé que era una buena ocasión para ver al Pegaso enganchado a un "semi". Quizás nunca vea a este cambión enganchado a nada, así que aprovechando que los vigilantes de seguridad andaban de ronda me acerqué a la góndola e hice las fotos que os muestro a continuación.


Espero que os gusten las fotos, era un capricho que tenía y por fin tengo estas imágenes. Aunque solo fuera por unos momentos mi "352" volvió a sus mejores tiempos.

Saludos

jueves, 17 de enero de 2008

POR FIN A BUEN RECAUDO

Cualquier aficionado a coleccionar cualquier tipo de cosa, intenta siempre que su colección se guarde y conserve en las mejores condiciones posible. Intentará por todos los medios guardarla en el lugar idóneo para que dicha colección perdure y pueda ser observada por el resto de aficionados o amigos curiosos.


Cuando la afición que se tiene es la de por ejemplo, coleccionar sellos, monedas o mariposas, un mueble bien acondicionado o incluso una habitación entera de nuestro domicilio, se puede dedicar a nuestro particular museo. Si lo que uno colecciona son vehículos, la cosa comienza a ser problemática. Si tienes tu moto, la puedes guardar junto a tu plaza de garaje, si por el contrario, lo que tienes es un Seiscientos necesitaras la plaza de garaje completa. Ahora bien, la cosa se complica cuando lo que te ha dado por coleccionar son camiones, y el tema se hace realmente difícil cuando tienes más de uno y más de dos. En estos dos últimos casos la única solución a nuestro problema y a nuestra fiebre “coleccionista”, pasa por tener un terreno o parcela donde aparcarlos. Claro, ésta solo puede ser una solución temporal, ya que los vehículos a la interperie se deterioran a ojos vista, por lo que la solución final pasa por hacerse con una nave industrial donde meterlos y tenerlos a buen recaudo.



Esto que contado así parece sencillo es en realidad complicado, visto como está la vida, las hipotecas, y no olvidemos que se trata de una afición o un capricho, con lo cual es realmente complicado que esto finalmente suceda. En mi caso y tras casi ocho años de tener camiones a escala real, por fin me ha llegado la hora en la que pueda disponer de una nave donde cobijar y cuidar a mis Pegaso.

El pasado jueves 3 de Diciembre comenzamos con el traslado de dos de los vehículos, pues el tercer Pegaso (que sigue a la interperie), está en proceso de restauración y se encuentra prácticamente desmontado, por lo que hasta que no se encuentre en condiciones de marcha no se unirá a sus dos hermanos.


El transporte le fue encomendado a Grúas y Talleres Saavedra, empresa sevillana, con la que ya he trabajado varias veces, y con la que volvere a trabajar cada vez que tenga que mover uno de mis cacharros, por su buen trato y profesionalidad, así que aprovecho para darle las gracias a Fernando, que con la ayuda de su Atego hicieron posible y fácil, el traslado de los mastodontes.

En primer lugar nos llevamos el 352 que a pesar de la lluvia reinante arrancó a la primera. Para hacer más segura la subida y bajada de los Pegaso, se utilizó el cabrestante de la plataforma que guió a las mil maravillas a los Pegaso. Hay que decir que las baterías se comportaron como unas campeonas, pues después de pasarse 7 meses descargadas, bastaron dos días de carga lenta para volver a recuperarlas. El mérito de ésto también hay que dárselo al cargador Ferve 925 (una de las mejores inversiones que he hecho) que puede con lo que le echen.


El primer viaje sin problemas, en el punto de destino el Pegaso arrancó de nuevo a la primera y lo dejamos reposar en su nueva casa (estoy seguro que respiró aliviado). Tras esto desmontamos las baterías y nos fuimos a "vitaminar" el cuerpo pues el esfuerzo lo merecía.

El Troner esperaba su turno, así que le pusimos "las pilas", basculamos la cabina y con la ayuda al arranque del cargador (que no hubiese hecho falta), la Troneta comenzó a resoplar de nuevo. Previamente le habíamos desmontado el espoiler del techo y la toma de aire elevada, pues teníamos que pasar por un punto donde existe un puente con tan solo 4 metros de altura libre, así que como el Atego hasta la plataforma tenía 1,20 mts y el Troner hasta el techo otros 3 mts más, decidimos asegurarnos metiendo las ruedas delanteras en unas trampillas que lleva el Atego y que nos hicieron ganar unos cuantos centímetros extra. El único pero de la carga fue, que al meterlo en las trampillas, tocamos el escalón de subida a la cabina del lado del pasajero y la fibra se rajó un poco (habrá que ir de desguaces a buscarlo). Una vez cargado camino a su nueva casa y a descargar. Hubo que ayudarlo a salir de las trampillas con la polea del cabrestante, pue sel camión patinaba, pero finalmente quedó a parcado junto a su hermano mayor.

Próximamente seguiremos con el traslado de más chismes...

domingo, 6 de enero de 2008

SALVEMOS UNA PARTE DE NUESTRA HISTORIA


Desde este Blog, nos queremos solidarizar y unir a todos los que se están esforzando para que no sea achatarrado el prototipo de nuestro querido BMR-600, y que es comocido como V-001 por la matricula que lucía.

Después de años de existencia este vehículo está a las puertas de su achatarramiento por el Ministerio de Defensa. Os aconsejo que visitéis la página del Círculo Trubia http://circulotrubia.blogspot.com/2008/01/salvemos-el-bmr.html donde encontraréis las instrucciones necesarias para que vuestro apoyo sea recogido.

A ver si entre todos conseguimos que esta parte de nuestra historia industrial se conserve, ya que nos encontramos ante un producto 100% diseñado en España por el Centro Técnico de Enasa.

¡¡SALVEMOS AL BMR!!